La noche ganó la batalla al día.
La luna va ocupando su lugar en el cielo estrellado.
Blanca y radiante ilumina esta pequeña habitación sin
vistas.
Mi sombra parece pequeña, indefensa, frágil…
Suenan, a lo lejos, las voces de mi ciudad;
los niños que se resisten a irse a la cama,
las parejas que intentan alegrar su, difícil,
día,
aquellos abuelos que ríen mientras recuerdan momentos del
pasado.
Mi vida se va durmiendo a medida que mi alma despierta,
Mis sueños toman el relevo que dejó un monótono día.
Mientras tanto,
mi sombra recorre la habitación
hasta que el primer rayo de sol me hace despertar y recordar
que
al final logré dormir.
Logré soñar contigo…
Amarte aún cuando no estabas a mi lado,
besarte aún cuando el sabor de tus labios apenas recuerdo,
sentirte aún cuando sé que no volveré a hacerlo…
Deseo que pase pronto este día para volver a sumergirme en un nuevo
sueño que me acerque a ti...
Siempre Tuya. Clarita