Matisse y La Alhambra

Ahora que ya entramos en el fin de semana, os propongo un magnífico plan que se puede extrapolar a los venideros...
Tenemos la suerte de tener la oportunidad de ver una magnífica exposición única por todos los elementos que se han unido en ella.
Se trata de la exposición de Matisse y la Alhambra. Siempre se dijo que, Henri Matisse, fue un enamorado del mundo islámico, pasión que se incrementó al visitar La Alhambra.
En total son cincuenta obras divididas en óleos, dibujos, litogramas, esculturas y cerámicas...Así como una colección de mantones de manila y telas Alpujarreñas del propio artista...

No os adelanto más, simplemente, que no os lo podéis perder, así que suban por el hermoso Bosque de la Alhambra ahora con su manto caduco de hojas secas, hermoso sin duda.
Aún con el poco aliento que os irá quedando, no dejéis de admirar la Puerta De La Justicia, crucémosla y demos así un salto hacia la historia islámica de nuestro país, aquellos muros albergando una cultura tan diferente pero a su vez tan atractiva para nuestros ojos que no dejan de enamorarse de este palacio rojo, mágico, hermoso...
Bueno, siguiendo el camino, una cuestecita más y llegamos a una explanada donde justo frente a nosotros, encontramos El Palacio De Carlos V, una curiosidad, miréis donde miréis en su interior, encontrareis lo mismo, armónico palacio que alberga esta maravillosa exposición.

Tras esta maravillosa experiencia, bajaremos y degustaremos una rica tabla caliente en la Castañeda, allí cerquita de esa callecita llenita de teterías donde finalizaríamos este mágico día...

Bueno, que os parece, ¿os apuntais? no olvidéis avisar, eh??jeje

Siempre Tuya.Clarita

Un Café Para Soñar Un Mundo Al Revés

En ocasiones, es bueno recordar nuestros propios principios para no caer de nuevo en los mismos errores, para no volver a revivir eso que te hizo sufrir o, en el peor de los casos, que hizo sufrir a alguien a quien querías.
El caso es que últimamente, tan ensimismada en el trabajo, en casa, en tener una vida correcta, he olvidado, en parte, esas cositas que llenaban espacios de mi ajetreada vida, esos huequecitos que se escapaban de las formalidades y de las cortesías.
Tanto esfuerzo, tantas horas dedicadas a mil cosas y a ninguna, sin tener tiempo de charlar con los amigos, de dedicarles el tiempo que se merecen y que yo merezco...

Esto no puede seguir así, por eso, mi rinconcito se llena hoy de cafecitos para sentarnos a charlar todos largo y tendido.
Tengo poquitos amigos pero puedo presumir de ser de verdad, de encontrarlos allá donde voy y no importar el tiempo que pase porque cuando volvemos a encontrarnos, parece que en verdad fueron horas las que nos separaron de nuestro último encuentro a pesar de que han podido pasar años y años.

Este fin de semana me toca reencontrarme con muchos de ellos, con los amigos de la facultad, complices y casi hermanos. Nunca me cansaré de decirlo, aquellos años, aquellos maravillosos años llenaron mi vida, no tanto lo que nos unía, ya que casi ninguno de nosotros seguimos relacionados con la historia, con la arqueología, pero sí lo llenaron momentos pasados en aquella aulas, sobretodo, en la cafetería de Luís, que cada mañana me decía :"ya viene la señorita del principado de Antequera" ay que años!todavía suelto carcajadas al recordar mi inocencia cuando, en medio de una clase de doscientas personas, se me ocurrió preguntar, animada por mis compañeros (¡que petardos!) "perdone, pero, está hablando continuamente del culto fálico y mi pregunta es: ¿qué es un falo?" en fin, no tengo excusa, o sí, pero colgué con aquella anécdota los cuatro años de carrera, y supongo que los siguientes aunque ya no sabían ponerle cara las sucesivas promociones a quien hizo esa gran pregunta o al menos, eso espero.

Ellos y todos los demás que estaban antes, que siguen estando, que van llegando, sois mis compañeros de viaje, de penas y alegrías y por eso os quiero a cada uno de vosotros...

Ainssss!!!!siempre me ocurre lo mismo, esto es por culpa de cumplir años, que intentas volver al pasado aunque os aseguro que el presente me fascina, eso sí, no tanto lo que veo a mi alrededor, nos comíamos el mundo, en las reuniones queríamos arreglarlo todo, era fácil, simplemente había que luchar por lo que un día constituimos como nuestros principios, nos denominaban la trupe rojilla, y ahora míranos, callando y mamando...

Como dijo Goytisolo:
"Erase una vez
un lobito bueno
al que maltrataban todos los corderos.
Y había también
un príncipe malo,
una bruja hermosa
y un pirata honrado.
Todas estas cosas
había una vez.
Cuando yo soñaba
un mundo al revés".

Pues eso, soñemos con un mundo al revés...

Un besote a todos, gracias por estar ahí y el domingo no olvidar que nuestro rinconcito se viste de fiesta para celebrar mi 31 cumpleaños...

Siempre Tuya. Clarita